12-Diciembre-2008

Hoy me han llevado al médico para que me vea esas patitas hinchadas y mi ombligo, y ¡lo que me faltaba! Tengo infección en el ombligo, porque mi primera mama me lo cortó demasiado corto al nacer. Me han mandado un jarabe de antibiótico para niños, y me lo tienen que dar cada 8 horas. Anda, que entre este jarabe, y las gotas de los gases, vamos apañados. También me limpian mucho el ombligo, y ¡que frío está ese producto rojo, jolin!. Yo intento protestar y moverme mucho para que no me lo eche, pero mi mamá me ha dicho que es necesario y, nada, me tengo que aguantar. El médico le ha dicho a mi mama que hay muchas probabilidades de que me muera, porque soy muy pequeña y ella se ha puesto muy triste. ¡Pero que dice este médico!, si ya peso 400 gramos, y esta noche hago ya 5 días. Y yo no estoy dispuesta a que una infección me deje sin ver todo lo que tengo que ver en esta vida. Lucharé con todas mis fuerzas para ganarle la batalla a esa infección. Además ya no me dan las gotas para los gases, que bien. El médico me ha hecho un regalo que mola un montón. Es un guante con agua calentita dentro. Jolín como me gusta. Ojalá y mi mamá no me lo quite porque me gusta mucho. Por cierto, sigo sin tener nombre.